Peñarol recibe a Ferro Carril Oeste. Será a partir de las 21.30 en el Polideportivo. Ganar es clave para cortar la mala racha y para mantener el segundo lugar en la Conferencia Sur.
Con el peso de dos derrotas seguidas en condición de local sobre sus espaldas, Peñarol enfrentará esta noche a un muy necesitado Ferro Carril Oeste, nuevamente en el Polideportivo Panamericano “Islas Malvinas”, a partir de las 21.30.
El “milrayitas” sólo ha ganado uno de sus últimos cuatro partidos. Sin embargo, como el resto tampoco escapa a la irregularidad, todavía conserva el segundo puesto en la Conferencia Sur de la Liga Nacional de Básquetbol. Por supuesto que la dolorsa caída en casa ante Juventud Sionista, último en la Conferencia Norte, hace que todo parezca peor.
El conjunto dirigido por Sergio Hernández ostenta la segunda mejor ofensiva de la Liga (anota 84,6 puntos de promedio por partido). Sólo es superado por San Martín de Corrientes (85,4), aunque ese potencial en ataque no es novedad para Peñarol. Su deuda, claramente, está en el apartado defensivo, más allá de que haya esbozado una leve mejoría en la caída del martes frente a Ciclista Olímpico de La Banda.
Lejos, muy lejos, ha quedado la euforia por el ascenso y la consiguiente recuperación del status perdido para Ferro. Y también lejos el inicio prometedor en la presente temporada.
Sumido en una crisis de juego y de resultados, el “Verde” descendió abruptamente en la tabla de posiciones de la Conferencia Sur (marcha octavo) y clasificar para los play-offs se ha vuelto una empresa ciclópea.
Los de Caballito no ganan desde el 23 de febrero, cuando vencieron como local a Obras Básket, 86 a 76. A partir de ahí, perdió seis partidos seguidos. El último de ellos, ante Boca Juniors, en el propio “Héctor Etchart”, por 71 a 64.
Su rendimiento es una incógnita. Puede tener partidos muy buenos y otros, bastante malos. Cuenta con un juego interior titular muy fuerte, con el puertorriqueño Ramón Clemente y el estadounidense nacionalizado italiano Ryan Amoroso, aunque en realidad se trata de una reformulación del equipo, ya que la operación de ligamentos de Cristian Amicucci lo dejó sin su pivote titular. Ese cambio obligado sobre la marcha sin dudas le ha costado a Ferro perder un terreno que será difícil de recuperar. Especialmente de cara al domingo, cuando se medirá con Quilmes en un choque casi definitorio para seguir o no con esperanzas de poder llegar a zona de play-offs por el campeonato.
Mientras tanto, la orden de jugar llegará en el Polideportivo. Y Peñarol también ansía obtener una victoria para volver a confiar en sus armas y para seguir con la ilusión de poder ser el primero en el Sur.
“Una historia de locos” se vende en el Poli
“Una historia de locos”, el libro que recorre la trayectoria de Peñarol durante sus primeros treinta años en la Liga Nacional, escrito por el periodista de esta sección Sebastián Arana, con la colaboración de Martín Pellegrinet, puede conseguirse en ocasión de este partido en el stand de merchandising del club ubicado en el anillo interior del estadio Polideportivo, a metros del portón de acceso principal.